Amanece un día helado, gris y pesado en Madrid. Levantarse es una tortura y mi cabeza amenaza con estallar. Casi a ciegas abro el correo y encuentro un mail de un amigo con un enlace a youtube.
Tremendo subidón, adrelina pura, rock en vena... el Boss y Fernando lograron lo que nada ni nadie había logrado en meses, hacerme salir a la calle con una sonrisa.
domingo, 30 de noviembre de 2008
Subidón
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1 comentario:
Hay que quedar para matar esas penas no solo a golpe de rock.. tambien de palabras y vino.
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