
Curioso pero, por una vez, me di cuenta que, en comparación, también Madrid tiene cosas buenas y otras esconden defectos, que no todo es estresante, sofocante y sofocador aquí, que a cierta distancia se ven mejor las virtudes . Por una vez no volví enfadada.
Aunque también volví a sentir que me iría de nuevo, si hiciera falta al fin del mundo, en busca de un sueño.
Y de paso disfrutar de lo bella que es la perspectiva desde la distancia.
1 comentario:
Se te echaba de menos.
Un abrazo y a encontrar esos sueños!
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